Mas sin embargo hubo muchos días , que simplemente hubo días de lucha y de mucha obscuridad , para mi , en que me esforzaba , oraba e intentaba aprender de muchas formas sobre mi situación , mi fe mi amor , mi esperanza , que son mis tesoros mas importantes en mi vida.
Como les digo siempre me disculpo con ustedes , soy novato en la vida y la Biblia , mis padres se aseguraron que terminara mis estudios académicos y fuera a la universidad, pero me siento un novato como quiera en estos menesteres .
Pienso que Dios es tan maravilloso que nos habla de muchas maneras , aprendiendo de calle en calle , bamboleando de pared en pared , escarbando sobre la tierra , nos da señales y lecciones para seguirlo , lecciones muy eficientes que yo conservo con aprecio como si fueran oro , mirra e incienso , pero creo que la mas eficiente , tal vez rápida y correcta es aprender apropósito , que es estar en la presencia del Señor osea : estar en la misa , escuchar la palabra de Dios , concentrarse en la explicación , saborear cada momento.
Esto no quiere decir que nos alejemos de las otras formas de aprender , no seria sabio , ya que experimentaremos muchas cosas enriquecedoras en nuestra vida , simplemente decir que si elegimos aprender a apropósito , vayamos con alguien que sabe o a recorrido mas ese camino.
Escuchar las palabras del Fr. Pablo A. Luna , en otras palabras un profesional de la materia, a mi me hicieron consciente de muchas cosas, no es que otros sacerdotes , presbíteros o frailes no supieran. Pero como dice el señor PS no estaba preparado , no hacia ni me beneficiaba de lo antes mencionado.
En mi caso me canse de buscar y experimentar , decidí ir con el un profesional en la materia , osea el fray Pablo , como licenciado en sagradas escrituras.
Me hizo ver cosas extraordinarias que no había visto , por necedad de creer que sabia. Y al aplicarlas tal vez me sentí como Natanael , lo que si estoy seguro es que creo por que me dijeron y el efecto que transformo mi vida. A tal grado que no dejare de decir: Rabbí, tú eres el Hijo de Dios, tú eres el Rey de Israel.
47.Vio Jesús que se acercaba Natanael y dijo de él: «Ahí tenéis a un israelita de verdad, en quien no hay engaño.»
48.Le dice Natanael: «¿De qué me conoces?» Le respondió Jesús: «Antes de que Felipe te llamara, cuando estabas debajo de la higuera, te vi.»
49.Le respondió Natanael: «Rabbí, tú eres el Hijo de Dios, tú eres el Rey de Israel.»
50.Jesús le contestó: «¿Por haberte dicho que te vi debajo de la higuera, crees? Has de ver cosas mayores.»
51.Y le añadió: «En verdad, en verdad os digo: veréis el cielo abierto y a los ángeles de Dios subir y bajar sobre el Hijo del hombre.»
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